1412-2012 : Aragón revive el pacto que evitó una guerra hace 600 años

 
El compromiso de Caspe, 1412,
fruto de la Concordia de Alcañiz
Las Cortes de Aragón han trasladado hoy su sesión plenaria a la capital del Bajo Aragón (Teruel) para conmemorar el sexto centenario de la firma de la Concordia de Alcañiz, un pacto entre los reinos de la Corona de Aragón que evitó una guerra civil por la sucesión y que es hoy día un valor con plena vigencia.


La Concordia, evitó una guerra

Ante la muerte en 1410 del rey Martín I "el humano" sin descendencia y sin nombrar un sucesor aceptado, representantes de Aragón y Cataluña firmaron el 15 de febrero de 1412 la denominada Concordia de Alcañiz, a la que posteriormente se adhirió el reino de Valencia. Gracias a la Concordia de Alcañiz se designaron a los nueve compromisarios (tres por cada territorio) que dos meses después debatirían en Caspe (Zaragoza) sobre los derechos de los pretendientes y decidirían quién debía ocupar el trono de la Corona de Aragón.

Los compromisarios eligieron un punto equidistante de los tres territorios, el Castillo de Caspe, para la deliberación, de la que salió proclamado Fernando de Trastámara, luego Fernando I de Aragón, el 28 de junio de 1412. El encargado de elegir a los nueve compromisarios fue Juan Jiménez Cerdán, Justicia Mayor del Reino, y uno de estos nueve, Berenguer de Bardají, fue después Justicia entre 1424 y 1432. Dos insituciones, de las que ya hemos hablado en estas páginas, fueron claves en esta Concordia: el Justiciazgo y las Cortes, que hicieron imperar la justicia sobre la fuerza. Ambas  habían surgido siglos atras como contrapeso al poder.

Para contrarrestar el recelo que podría causar entre la población la figura de Fernando de Trástamara (Casa dinásica que provenía de Castilla) se potenció al Justicia Mayor como elemento limitador del poder  del monarca, y se determinó que sería un personaje inviolable, que sus decisiones serían irrevocables y sus resoluciones, de obligado cumplimiento. Con la Concordia se dio una lección al mundo en una cuestión tan belicosa por aquel entonces como la sucesión monárquica. Se logró un acuerdo en un momento convulso en el que casi todo se solucionaba con la espada, poniendo por delante el diálogo para resolver los problemas.

Entradas populares de este blog

Mesa de la Hospitalidad en Zaragoza

EL JURAMENTO DE LOS REYES DE ARAGON

"AQUÍ NUNCA PASA NADA"