1º DE MAYO EN ARAGÓN: liderando la destrucción de empleo
Dicen las cifras oficiales (que son el resultado de muchas sesiones de maquillaje) que en el último trimestre del 2010 Aragón superó los 100.000 parados y se puso la segunda en el rankin de comunidades destructoras de empleo con 16400 parados más en el pasado año. ¡Menudo triunfo!. Para que nos hagamos una idea los 103.300 parados con los que Aragón cerraba el año se equiparan a la población de Huesca, la de Teruel y la de Alcañiz juntas. La tasa de desempleo se sitúa así oficialmente en el 16%, cifra desconocida desde 1995. Esto lleva a casi 5000 aragoneses a buscar empleo en el extranjero ¿Se puede sostener esto en nuestra comunidad?. No olvidemos que la población es la verdadera riqueza de un pueblo. El paro genera una auténtica sangría en nuestra comunidad.
Los sindicatos mayoritarios siguen con su cantinela de que esto es por culpa de la reforma laboral y la patronal con que es algo poco menos que inevitable. El caso es que quienes realmente sufren el paro y la precariedad no suelen ocupar titulares como estos “agentes sociales” pero sin embargo también tienen su propia valoración sobre el mismo. ¿Qué dicen las víctimas del paro? ¿Alguien les ha preguntado?
Sabemos que tratan de salir adelante como pueden. Cáritas ha duplicado las ayudas el año pasado y denuncia el recorte en gastos sociales de las administraciones públicas. En Teruel se están ocupando cuevas por parados que se han quedado sin vivienda. En Zaragoza se ocupan casetas vacías en el entorno de la Expo para pasar la noche sin morir de frío...
Este es el panorama de nuestra comunidad en vísperas del 1º de mayo, fiesta del trabajo, en la que conmemoramos las conquistas laborales y sociales que el Movimiento Obrero consiguió con la sangre y el sufrimiento de muchos luchadores del mundo del trabajo. Hoy el paro en Aragón, como en España, como en el mundo es el resultado de un sistema en el que el trabajador es considerado como una herramienta más que se desecha cuando sobra y se contrata de cualquier manera cuando interesa al capital. La altísima tasa de temporalidad que supera el 90% en Aragón tiene mucho que ver con el incremento imparable del paro en estos meses. Y las políticas de flexibilización del empleo por las que apuestan el PSOE, el PAR y el PP, entre otros son las recetas de este sistema para la crisis. Así que va siendo hora de que nos planteemos cambiar desde las mismas asociaciones y el tejido social nuestro modelo político y económico para que la persona, el trabajador y no el capital sean el sujeto y el primer objetivo a tener en cuenta en todos los planos y no el último.
